El folato, un nutriente muy importante para la salud y abundante en los vegetales

Un estudio nuevo divulgado por Madri+d ha mostrado que la carencia de folato genera problemas en la división celular y la replicación del ADN. Es más, las consecuencias son mucho más graves de lo que se pensaba anteriormente.

Fecha: 25-Apr-2019

Fuente: Actualfruveg

El folato es una vitamina esencial para la salud humana. No obstante, el organismo no es capaz de almacenarla, por lo que ha de ingerirse mediante alimentos ricos en folato o suplementos de ácido fólico (folato artificial). Son pocas las gestantes que desconocen la importancia del folato para evitar anomalías congénitas. Lo que quizá no es tan obvio para todo el mundo es que esta vitamina, denominada B9, puede proteger contra la anemia, la infertilidad, muchos cánceres, diversas afecciones psicológicas y demencia relacionada con la edad. Aun así, no se sabe a ciencia cierta el modo concreto en el que una deficiencia de folato puede provocar tantas enfermedades.

Un estudio reciente publicado en la revista «Proceedings of the National Academy of Sciences» ha aportado algo más de información al respecto. Respaldado en parte por el proyecto financiado con fondos europeos CHROMAVISION sus datos muestran cómo la deficiencia de folato puede dar lugar a problemas relacionados con la división celular y la replicación del ADN. De hecho según apuntan los autores del estudio las anomalías cromosómicas provocadas por esta deficiencia son más perjudiciales de lo que se pensaba hasta ahora.

«La deficiencia de folato afecta al mantenimiento de los cromosomas y cuando una célula ha perdido parte o todo un cromosoma ya no lo puede recuperar. Esto es si se producen errores en la división celular no es posible repararlos consumiendo mucho ácido fólico. Una vez generada la lesión esta es irreversible» declaró en un artículo publicado en el sitio web de noticias científicas Futurity Ying Liu profesora asociada del Departamento de Medicina Molecular y Celular del Centro de Estabilidad Cromosómica en la Universidad de Copenhague entidad asociada al proyecto.

Los investigadores analizaron el locus genético denominado FRAXA, el cual contiene una secuencia repetida del patrón químico citosina-guanina-guanina (CGG). Averiguaron que la deficiencia de folato provoca una segregación cromosómica defectuosa en este locus. Además, descubrieron que la privación continuada de folato desestabiliza completamente el cromosoma X.

«En el estudio, demostramos que la deficiencia de folato genera más anomalías cromosómicas y más perjudiciales de lo que se pensaba hasta ahora. Esto causa a su vez que las células derivadas hereden una cantidad errónea de ADN tras la división celular o, en ciertos casos, se pierda un cromosoma completo. Así se explica por qué la deficiencia de folato guarda relación con enfermedades como la infertilidad, afecciones de la salud mental o el cáncer», explica Liu.

Existen varios locus en el genoma humano donde se repite con profusión el patrón CGG. Según los autores del estudio, es necesario realizar investigaciones adicionales dedicadas a estas regiones, para determinar si la deficiencia de folato podría desestabilizar cromosomas y provocar enfermedades con el paso del tiempo. CHROMAVISION (Super-resolution visualisation and manipulation of metaphase chromosomes) concluirá en mayo de 2019. El proyecto trabajó para mejorar las técnicas de obtención de imágenes y ampliar los conocimientos que se poseen sobre los mecanismos cromosómicos para, de este modo, determinar qué provoca ciertas enfermedades y dar con fármacos nuevos.

Más sobre el folato
El folato (vitamina B-9), explica la Clínica Mayo, es importante para la formación de los glóbulos rojos, así como para el normal crecimiento y funcionamiento de las células. Insiste en la importancia de este nutriente durante las primeras etapas del embarazo, para reducir el riesgo de que el bebé tenga defectos congénitos en el cerebro y la columna vertebral.

El folato se halla principalmente en los vegetales de hoja verde oscuro, la espinaca es una de ellas (y es deliciosa también consumida en crudo), brócoli, acelgas, espárragos verdes, lechuga,… las habichuelas (frijoles), los guisantes (arvejas, chícharos) y los frutos secos.

Las frutas ricas en folato son las naranjas, los limones, las bananas, los melones y las fresas. La forma sintética del folato es el ácido fólico.

¿Crudos o cocinados?
Un estudio español publicado en el Journal of Food Science mencionado por BBC mundo concluyó que llevar las verduras a ebullición, una de las formas más populares de prepararlas, conlleva una pérdida importante de su contenido de vitaminas y otros antioxidantes. Se menciona la vitamina K como resistente al calor, y no así a otras entre las que se encuentra el folato. “Las (vitaminas) A, C, B-1, B-2 y el ácido fólico, son sensibles al calor y pueden perderse o destruirse al cocinar la verdura hervida o al vapor.” En resumen, … “las cualidades de las verduras se pueden ahogar en el agua de cocción“.

Otras vitaminas y nutrientes pueden quedar intactas, pero se escurren con el agua.

Las recomendaciones, de la  Asociación Española de Dietistas-Nutricionistas para minimizar la pérdida de nutrientes por cocción, también aplicables al ácido fólico son:
– Pelar y cortar el alimento poco antes de prepararlo y/o consumirlo.
– Emplear tiempos cortos de remojo.
– Esperar a que el agua hierva para sumergir el alimento.
– Añadir un chorrito de vinagre o de zumo de limón al agua de cocción.
– Cocinar las hortalizas “al dente” y enfriarlas lo antes posible.
– Aprovechar el agua de cocción para elaborar otros alimentos.