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RAIF: Tomate de industria, inicio de recolección

Esta campaña comenzaron a plantarse las primeras parcelas de tomate de industria a principios de marzo, y las últimas a principios de mayo. Este cultivo presenta un ciclo de unos 4 meses, por lo que en estos momentos es cuando las parcelas más adelantadas se encuentran en el momento óptimo de recolección, en torno al 90% de frutos rojos.

Aunque se esperaba un retraso importante en la recolección este año, las altas temperaturas de estos días han adelantado el inicio de esta operación, respecto a lo previsto inicialmente. Esta semana ha comenzado la recolección de las primeras parcelas de la provincia, unas dos semanas más tarde que la campaña pasada, y todavía a un ritmo bajo. La semana que viene se generalizará algo más, con apertura de fábricas el 13 y 16 de julio, comenzando así esta operación en las diferentes zonas de producción.

Mildiu (Phytophthora infestans) y Bacteriosis son las enfermedades que han afectado al tomate este año. Su incidencia ha sido elevada, superior a las campañas anteriores, y esto condicionará la producción final, en mayor medida en las parcelas más tempranas, plantadas en marzo, que han acusado más estas enfermedades. Las temperaturas de estos días limitan el desarrollo de mildiu, pero se recomienda estar atentos a la evolución de la enfermedad en parcelas más tardías, según sean las condiciones meteorológicas de las próximas semanas.  

En estos momentos se desarrollan principalmente:

La Oidiopsis (Leveillula taurica). Esta enfermedad, a diferencia de las anteriores, tolera mejor las altas temperaturas y aunque precisa condiciones de humedad, no es tan exigente como el mildiu. Se desarrolla en estados más avanzados del cultivo, hacia la fase de maduración durante el verano. Comienza a colonizar la planta por las hojas inferiores, progresando hacia arriba en función de las temperaturas y la humedad, condicionada en gran medida por rociadas, riegos, etc. Se observan síntomas, por lo general bajos.

Plagas como Heliotis (Helicoverpa armigera) y Tuta (Tuta absoluta), están aumentando su actividad, tanto de adultos como de huevos y larvas pequeñas, de forma general.En zonas de Vega destacan los índices de Tuta, con capturas que se mantienen elevadas, y una mayor presencia de galerías, y se realizan tratamientos para su control en las parcelas que superan umbral. En el Bajo Guadalquivir los índices de Tuta son más bajos que en la Vega, sin superar por lo general los umbrales, y los tratamientos son escasos de momento. Se recomienda estar atentos a su evolución, pues en este período, hasta la recolección, es cuando la Tuta suele presentar un mayor desarrollo. 

En cuanto a los ácaros: Eriófidos (Aculops lycopersici) y Araña roja (Tetranychus urticae), también se encuentran presentes, y en aumento. Es importante seguir de cerca la evolución de estas plagas, pues a partir de estas fechas es cuando su incidencia puede ser más elevada, y requieren más atención.

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