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Una idea que ha sido presentada en el Centro Tecnológico de la Agroindustria (Adesva) que la consejería de Innovación gestiona en Lepe (Huelva), y que supone el primer modelo de invernadero especialmente diseñado para el cultivo de la fresa que permite duplicar la superficie plantada respecto a los tradicionales. Valentín Sesma, en nombre de la empresa que lo ha diseñado, ha indicado que su principal característica es que incrementa los metros lineales dedicados al cultivo tradicional, "y frente a los 8.000 o 9.000 metros, pasa a tener 20.000 metros lineales de cultivo en una hectárea".

Todo ello mediante distintos elementos en hidropónico (cultivos en altura), y mediante un sistema denominado NGS, "que debido a su ligereza se puede colocar en una estructura un poco más sólida de la tradicional y puede tener muchos más metros lineales por hectárea", ha explicado.

Supone también, según ha indicado, que se cuenta con más facilidad a la hora de colocar y retirar los plásticos agrícolas, "y se puede mantener el invernadero abierto incluso en momentos de lluvia, además de que es mucho más resistente en condiciones de fuertes vientos, como se ha sufrido en este año".

Este nuevo sistema, que ya está disponible, supone una inversión mayor que un macrotúnel convencional, sin tener en cuenta el precio del terreno donde se asiente, aunque Valentín Sesma sostiene que, para tener la misma producción necesitaría tres hectáreas, y se puede tener en una sola, además que en dos años se recupera la inversión".