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Así lo ha asegurado el consejero de Medioambiente y Ordenación del Territorio, Borja Sarasola, durante la visita a una finca agrícola ubicada en Aranjuez.

Este crecimiento del número de empleos supone que la cifra actual de trabajadores del sector agroalimentario se eleva a 20.000, que están distribuidos en 1.346 empresas.

"En estos momentos -ha declarado Sarasola- hay 100.000 familias en la región viviendo del sector agroalimentario, lo que supone el 7% del PIB industrial de la Comunidad de Madrid". Esto se debe sobre todo a la generación de puestos indirectos.

El consejero de Medioambiente ha justificado esta subida del empleo por las ayudas que ha destinado el Gobierno regional al sector agroalimentario, que en 2013 han sido de 47 millones de euros.

"Hemos invertido sobre todo en modernización y el balance ha sido muy positivo, ya que gracias a ese dinero Madrid tendrá un sector agrícola más competitivo y adaptado al gusto del consumidor madrileño", ha dicho.

Dentro del paquete de subvenciones, 1,2 millones fueron destinados a la agricultura ecológica, cuyos productos han experimentado un incremento del 70% en el margen de beneficios entre 2007 y 2012.

A ello hay que sumar la partida de 450.000 euros de compensación a los agricultores de montaña, por las enormes dificultades con que se encuentran.

Por su parte, la ganadería, en concreto la recuperación de razas autóctonas, está recibiendo durante este año algo más de 500.000 euros.

Este tipo de ayudas, además del trabajo de investigación realizado por el Instituto de Investigación y Desarrollo Rural, Agrario y Alimentario -IMIDRA- ha supuesto duplicar el número de ovejas de las razas Colmenareña y Rubia del Molar.

El impulso a las asociaciones y cooperativas se ha traducido en más de 300.000 euros, a los que hay que añadir 1,5 millones para la mejora de la competitividad del sector de productos agrarios y de pesca.

Las subvenciones se completan con las iniciativas de promoción de los alimentos madrileños a través de campañas como "Madrid Sabe", que ha llegado a 53.000 madrileños.

La efectividad conseguida ha llevado a la Consejería a mantener las ayudas en 2014, según ha anunciado Sarasola, quien ha apuntado que el objetivo es seguir favoreciendo la creación de puestos de trabajo y lograr que los productos sean de excelente calidad.

"El mercado de Madrid sólo puede competir con otras comunidades autónomas si ofrece productos de calidad y los acerca al consumidor final. No podemos competir en cantidad", ha apostillado.

Aunque los principales receptores de estos productos se encuentran en la región, se está consiguiendo exportar denominación de origen de Madrid a otros países. Es el caso de los vinos.

"Se producen aquí 3.600.000 botellas, de las que un 30% se venden en el extranjero, principalmente en Estados Unidos, China y Alemania", ha comentado.

Además en la huerta madrileña se pueden encontrar casi todos los productos cultivables. En este sentido, el consejero ha puesto como ejemplo la ciudad de Aranjuez como "un punto de referencia de toda la geografía madrileña, un modelo de creación de oportunidades, porque el producto de Aranjuez es sinónimo de calidad".

Precisamente el consejero ha visitado la finca de los hermanos Gómez, dos veteranos agricultores de Aranjuez, acompañado por la alcaldesa del municipio, Mª José Martínez.