07/01/14
El primer fondo de inversión español que invierte en agricultura apuesta por 2014
El patrimonio inicial de Panda Agriculture & Water Fund FI, el primer fondo de inversión español que invierte en agricultura y el primero a nivel europeo que combina agricultura y agua, arrancó hace apenas unos meses con un millón de euros, cantidad que superará los 4 millones a lo largo de 2014. Así lo avanza a Efeagro Marc Garrigasait, gestor de inversiones del fondo en Gesiuris Asset Management SGIIC, quien, en una entrevista a Efeagro, remarca el interés de Panda Agriculture por firmas como Bunge, Archer Daniels, Yara International, Brazil Foods, Waters Corporation o Barón de Ley.
Pregunta: ¿Qué características diferenciales tiene este fondo?
Respuesta: Es un producto financiero novedoso basado en los activos más tradicionales de la historia: la agricultura y el agua. España es una potencia en el sector agrícola -viñedos, aceite de oliva, frutas y verduras o cereales-, pero no existía hasta 2013 ningún fondo de inversión de ninguna entidad financiera nacional que invierta en activos agrícolas o acuíferos. Gesiuris Asset Management SGIIC ha sido la pionera en lanzar este producto financiero.
P.- ¿Qué puede apuntar sobre Gesiuris y sus accionistas?
R.- Es una gestora de fondos independiente no ligada a ninguna entidad del sector bancario nacional y con vinculación con el mundo académico; Catalana de Occidente mantiene el 25 % de las acciones de la compañía. Da servicio a inversores minoristas, grandes patrimonios e instituciones; gestiona y administra casi 700 millones de euros y es la cuarta mayor entidad independiente en España por numero de fondos y Sicavs.
P.- ¿Cuál ha sido la evolución de Panda Agriculture desde su reciente puesta en marcha, en cuanto a contratación y rentabilidad?
R.- En los últimos seis meses la rentabilidad ha sido del +2,58 % en euros, con un riesgo o volatilidad inferior al 8 % anual, la mitad que la del índice bursátil Eurostoxx 50; la rentabilidad de la cartera ha sido entre el 5 % y 10 % en este semestre, pero la apreciación del euro en relación al dólar (USA) y otras divisas emergentes ha disminuido la rentabilidad efectiva a corto.
Cualquier apreciación futura de estas divisas supondrá un aumento en la rentabilidad del fondo. Prevemos que el patrimonio inicial de 1 millón de euros supere los 4 millones en 2014 y lo más destacable es la combinación de inversores institucionales nacionales con empresarios del sector agrícola en la composición de inversores en el fondo.
P.- ¿La creciente demanda de alimentos por una población mundial "in crescendo" dará alas a este tipo de inversiones?
R.- Los activos agrícolas han estado olvidados por la comunidad inversora en los mercados financieros. Los sectores tecnológico, financiero, petrolero y de materias primas industriales han recibido enormes inversiones en los últimos 20 años, pero el agrícola no se ha visto como un activo atractivo en el pasado, por lo que el potencial de inversiones futuras es enorme.
Por un lado, el crecimiento imparable de la población, la esperanza de vida y el incremento del poder adquisitivo medio, especialmente en Asia y, por otro, la escasez de suelo agrícola fértil y agua no contaminada hacen pensar que estamos muy cerca de vivir un "boom" de inversiones que el sector va a necesitar para poder proveer de alimentos al planeta.
P.- ¿En qué tipo de empresas invierte y dónde?
R.- Invierte en acciones de empresas cotizadas líderes del sector agrícola-ganadero y del agua a nivel global. La cartera estará diversificada en compañías propietarias de plantaciones agrícolas y ganaderas, productoras, procesadoras, así como proveedores de maquinaria, equipos agrícolas y fertilizantes, y, hasta un 20 % en relacionadas con el sector del agua: propiedad de derechos de agua, canalizaciones, riegos y sistemas de fluidos.
Invertimos en empresas de viñedos como la española Baron de Ley, en la Rioja; las norteamericana Archer Daniels, empresa "geostratégicamente" clave en almacenamiento y transporte de granos agrícolas, Waters Corporation, líder en análisis de agua o Lindsay Corp -maquinaria de riego agrícola-; la noruega de fertilizantes y derivados agrícolas Yara International; brasileñas como Brazil Foods, Bunge, Adecoagro o Brasilagro, y australianas como Graincorp, Nufarm o Ridley forman parte de la cartera del fondo. Tenemos empresas asiáticas (en Japón, Singapur o Indonesia), si bien la mayoría cotizan en Europa y EEUU.
P.- Si comparamos este fondo agrícola con otros clásicos, ¿cuál es su atractivo o ventaja competitiva?
R.- La principal ventaja es su excelente diversificación en relación con los activos y productos financieros del mercado. Los activos agrícolas tienen correlación negativa con los productos de renta fija a uno, tres y cinco años. En relación con los metales preciosos -oro y plata-, tiene una correlación cercana a 0, con lo que introducir activos agrícolas en una cartera de un inversor particular o profesional mejora enormemente el nivel de riesgo asumido diariamente.
La volatilidad o riesgo en 2013 de invertir en empresas de minas de oro y plata es seis veces mayor que en nuestro fondo agrícola. Invertir en activos reales como son las empresas agrícolas puede ser de gran ayuda en épocas futuras de incertidumbres monetarias o de alzas en la inflación. Y las enormes inyecciones de los bancos centrales en los últimos años pueden beneficiar el valor de los activos reales en relación a los monetarios.
P.- Algunas organizaciones denuncian la influencia de los fondos en agricultura con el encarecimiento de materias primas y en problemas de seguridad alimentaria en el mundo
R.- Nuestro fondo no invierte en futuros de materias primas agrícolas, sino en acciones de empresas cotizadas. Para poder alimentar a la población mundial se necesitan muchas mas inversiones de las empresas agrícolas y alimentarias. Por ejemplo, nosotros acudimos a las ampliaciones o salidas a bolsa de empresas agrícolas o de agua.
En cualquier caso, el encarecimiento de los precios agrícolas en el mundo es falso. En los últimos 100 años, no han subido ni al ritmo que lo ha hecho la inflación, perdiendo poder adquisitivo de forma clara año tras año. Este proceso es especialmente grave en España, con muchas empresas agrícolas en pérdidas. Este entorno global de bajos márgenes es un claro síntoma de que el sector agrícola se encuentra en un ciclo histórico de bajos precios y márgenes. En estas fases de ciclos bajos históricos en cualquier sector es cuando mas atractivas son las inversiones y mayores las rentabilidad futuras esperadas.