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Este Congreso que se celebra bianualmente, en cada ocasión en un país productor europeo distinto, se ha consolidado como el principal espacio europeo que aglutina a productores, comercializadores e investigadores ligados al sector del espárrago, configurándose como una plataforma de debate sobre la producción, innovación agronómica, comercialización, distribución y eco-sostenibilidad de este producto. En esta edición ha estado organizado por Asociafruit (Asociación de Empresas Productoras y Exportadores de Frutas y Hortalizas de Andalucía) junto a Euro Asper (Federación Europea de productores de espárrago).

El Congreso se inició con una visita técnica a plantaciones de espárrago verde y triguero, variedades principales en Andalucía, y varias cooperativas dónde se manipula el espárrago tanto en fresco como en conserva. Tras estas visitas, los más de 150 congresistas pudieron apreciar las diferencias organolépticas entre el espárrago verde y el espárrago triguero, objeto de la Denominación Específica Espárrago de Huétor Tájar.

Tras el acto de apertura del programa de ponencias a cargo de Ana María Romero, directora general de Industrias y Calidad Alimentaria de la Consejería de Agricultura y Pesca, de la Junta de Andalucía; Luciano Trentini, presidente de Euro Asper, y Thierry Jean, presidente sector espárrago Asociafruit, representantes de los distintos países europeos mostraron una panorámica de la producción de espárrago en sus respectivos países, situándose al alza en países como Alemania, Reino Unido y Holanda, y en franco declive en los países del arco mediterráneo (España, Italia y Grecia).

En el segundo bloque temático del congreso, dedicado a la investigación e innovación, se presentaron los últimos avances para evitar problemas fitosanitarios y de conservación, mejorar la productividad y el rendimiento del cultivo, contando con los más prestigiosos investigadores fitosanitarios de Europa.

En la última parte del congreso se debatió sobre la agricultura de proximidad como una de las opciones más interesantes que dispone el sector europeo del espárrago en defensa contra las políticas agresivas de exportación promovidas desde Perú y China, principalmente.

También hay que destacar como manifestación unánime de todos los asistentes la necesidad de una apuesta decidida del sector europeo por la promoción del espárrago con el objetivo de diferenciarlo frente al espárrago peruano y chino, de menor calidad pero con precios excesivamente bajos.

Durante el simposium se formó un grupo de trabajo para la regulación europea del espárrago silvestre, promovido por productores e investigadores principalmente de los países de la cuenca mediterránea.

Euro Asper ha servido además para analizar los retos de futuro del sector del espárrago y acordar fórmulas para abrir nuevos mercados, centrados especialmente en Europa del Este.

El espárrago en España

Andalucía produce el 78,7 por ciento del espárrago español, con una facturación cercana a los 167,6 millones de euros y cultiva cerca de 44.000 toneladas de esta hortaliza, de las que se exportan más de 6.000 toneladas. La segunda zona de referencia es Navarra, con casi el 10% de la producción nacional de espárrago, siendo todo de la variedad blanco. Con menos de un 7% se sitúa Extremadura en la tercera posición, destacando también el espárrago blanco.

Según ha apuntado Asociafruit, se han reducido a la mitad las exportaciones de espárragos a los principales mercados europeos, entre los que destaca Alemania, y el sector necesita buscar nuevas opciones para afrontar la competencia de la hortaliza en conserva, y resultar competitivos frente a nuevos mercados como el de Perú, China o México.

"Existe una apuesta fuerte por la agricultura de proximidad, por llevar el producto fresco a las grandes marcas, una especialidad en la que los productores europeos somos más competitivos por la calidad de nuestros espárragos", apostilló Thierry Jean, presidente de Asociafruit, asociación organizadora del congreso.

En los últimos años existe un abandono progresivo de este cultivo, reduciéndose la superficie dedicada en más de un 40%, dándose principalmente en Andalucía un proceso de sustitución del espárrago blanco al verde. Este declive está siendo motivado por la creciente dificultad en colocar el producto nacional en el mercado europeo, viéndose afectado por las políticas agresivas en precio de los exportadores chinos y peruanos.

"La diferenciación en la percepción del consumidor del espárrago de España, basada en la calidad superior del producto se contempla como la única vía para cambiar esta tendencia negativa", apunta Thierry.

En este sentido, la consejera de Agricultura andaluza, Clara Aguilera, ha incidido en la necesidad de fortalecer el sector mediante la reducción de la atomización y el apoyo a la concentración de la oferta, y "promover la investigación y la innovación en la creación de un nuevo embalaje para permitir una mayor conservación del espárrago fresco".