17/02/14
El virus BCTV golpea los rendimientos de tomate
"Estábamos viendo el virus BCTV (Beet Curly Top Virus), en áreas donde normalmente no estaba presente," comenta Gilbertson. Señalando que la enfermedad esta afectando a diferentes áreas en desiguales grados. Mientras que particularmente tiene una incidencia muy alta en los condados de Kern, Kings y Fresno, también se ha detectado en un grado menor en el resto del Valle de San Joaquín. El virus no fue detectado en el valle de Sacramento. "Para ilustrar cuán peligroso es, hemos de decir que lo hemos visto también en cucurbitáceas, que nunca con anterioridad se había detectado. En más de 20 años de estudios, este fue el primer año que ha sido visto en cultivos como el melón", añadió Bob Gilbertson. Se sospecha que una combinación de condiciones favorables para los vectores.
También está la hipótesis de nuevas cepas más virulentas de BCTV que tienen una gama más amplia de hospedantes o son capaces de transmitir más eficazmente. Históricamente, BCTV era un problema grave en remolachas hasta que la industria desarrolló remolacha resistente. Durante años fue una de las enfermedades más devastadoras de la remolacha azucarera.
Frente a este grave problema, se ha iniciado una línea de investigación con el objetivo de desarrollar un Programa de Manejo Integrado de Plagas eficaz para controlar el virus BCTV (Beet Curly Top Virus).
El virus tiene una gama amplia gama de cultivos a los que afecta, incluyendo frijoles, pimiento, espinacas, remolacha azucarera, verduras o cucurbitáceas, así como una gama de planta ornamental y especies de malas hierbas. Los síntomas pueden incluir rizado y amarillamiento de las hojas, necrosis del floema del tejido, así como el retraso del crecimiento y las distorsiones de las raíces y plantas. La enfermedad reduce el vigor de la planta y su rendimiento puede verse severamente afectado, o las plantas pueden morir de forma repentina.
El virus BCTV se propaga a través del vector “saltahojas de remolacha” (Circulifer tenellus) y también puede ser transmitida por injerto. El virus Inverna en los insectos vectores que permanecen infectivos durante toda su vida. Los “saltahojas de remolacha” migran en primavera y propagan el virus. Las malas hierbas y las plantas de cultivo pueden servir como reservorios de vectores y patógenos. El manejo de la enfermedad es difícil pero puede incluir el control de insectos vectores y plantas mediante herbicidas o métodos culturales. Ninguna resistencia genética se ha encontrado hasta ahora en tomate y todos los cultivares comerciales son susceptibles.