03/07/14
España demuestra eficacia de permacultura
La creación de cocinas solares, biodigestores y otras instalaciones ecológicas, demuestran la eficacia de los principios de la permacultura asumidos por la comunidad que habita la meseta cársica sobre la gran paleocaverna Bellamar, en la ciudad de Matanzas, España.
Unas 11 hectáreas de terreno son transformadas desde hace casi cuatro años como parte de una iniciativa orientada al aprovechamiento óptimo de los recursos disponibles, producir alimentos suficientes para unas 150 personas, y reducir el consumo de agua y energía.
Esteban Grau, delegado de la Fundación Antonio Núñez Jiménez de la Naturaleza y el Hombre en la provincia de Matanzas, explicó que el proyecto contribuye a salvaguardar el entorno de un sistema cavernario dotado de bellas formaciones geológicas, únicas en el mundo.
Entre las ecoconstrucciones más sobresalientes se ubica el llamado baño seco, servicio sanitario que no requiere de líquido alguno y permite almacenar los desechos humanos en compartimientos soterrados, durante alrededor de ocho meses, para luego emplearlos como abono.
Según apuntó el presidente del Comité Espeleológico de Matanzas (CEM), también funciona un laboratorio para estudiar la calidad del agua, y canteros en espiral, ondulados y de otras formas singulares que permiten aprovechar al máximo la superficie cultivable.
Grau comentó, además, que jóvenes franceses en su mayoría acuden cada año al sitio para intercambiar experiencias en materia de prácticas sostenibles, útiles para proteger el entorno natural sin renunciar a satisfacer las necesidades elementales del ser humano.
El espacio donde se cultivan árboles frutales y maderables y fomenta la cría de animales como conejos y tilapias, incluye un centro de documentación provisto de volúmenes impresos o en formato digital, además de audiovisuales referidos a diversas ciencias como la espeleología.
A decir de Nelvis Gómez, especialista del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA), la gran paleocaverna Bellamar, Monumento Nacional, se incluye en la red de una veintena de áreas protegidas que ocupa el 78 por ciento del territorio de la provincia de Matanzas.