29/01/15
La caída de los precios del petróleo podría bajar el precio de los alimentos, según Rabobank
Tanto, la producción como la transformación se podrían beneficiar de una reducción de los costes, que se podría traducir en un abaratamiento del alimento, abaratamiento que podría ir pasando a través de la cadena hasta el consumidor.
El informe de Rabobank señala que el coste del petróleo no es el que más peso tiene en la industria agroalimentaria, aunque si influye en la maquinaria agrícola y en la distribución de productos. Por el contrario, el gas, cuyo precio si está vinculado al del petróleo, influye mucho en determinados sectores como el de la horticultura, leche en polvo, cerveza, café, procesado de patata, entre otros.
Rabobank no cree que el consumo de alimentos, dada su escasa elasticidad, se ve afectado en su conjunto. El descenso de precios de los alimentos, si se produce, aumentaría la demanda de alimentos de alta gama.
Las optimistas perspectivas de Rabobank no son compartidas por muchos de los integrantes de la cadena productiva. Los productores han denunciado que a pesar de la caída del precio del petróleo, no se han reducido sus costes de producción.