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Irene Campos

13/05/13

La Generalitat Valenciana impide la venta de naranja sin precio fijo

El Consell ha dado un paso más para evitar los fraudes en las compras de naranjas en el campo. Recientemente, el pleno del Gobierno valenciano aprobó el proyecto de ley de contratos y otras relaciones jurídicas agrarias, que entre otros aspectos regula la venta a resultas, es decir, la compra de naranja sin un precio fijado. Esta es una de las reivindicaciones históricas que los agricultores han defendido a través de las organizaciones agrarias y, según detallan fuentes del Consell, puede comenzar a aplicarse ya durante la próxima campaña.

La norma establece que serán nulas todas las formas y cláusulas contractuales que hagan soportar al agricultor los riesgos de la comercialización de la fruta en los que no interviene. Así, la nueva norma recoge que debe haber obligatoriamente un precio fijado en el contrato o, al menos, un margen en el que pueda fluctuar la valoración final, pero esto siempre debe figurar por escrito.

Este documento serviría además como argumento jurídico ante un tribunal en el caso de que se sientan estafados en la transacción, tal como señalan fuentes de la Conselleria de Gobernación.

La ley regula asimismo la figura del corredor y la venta a ull, ambos aspectos también característicos del sector citrícola.

A pesar de todo ello, en las agrarias no las tienen todas consigo. El presidente de Fepac-Asaja, Néstor Pascual, destaca que “todo lo que sea intentar una regulación transparente es bueno”, pero se pregunta si “será suficiente” debido a las reticencias de los comercios y cooperativas “que nunca han estado de acuerdo con todo esto”. Este diario trató de recoger en varias ocasiones la opinión de la patronal Asociex, que no quiso valorar este avance en la normativa autonómica.

El responsable de cítricos de la Unió de Llauradors, José Ramón Urbán, comparte las dudas de Pascual y por ello destaca que desde la Unió siempre han solicitado “que el contrato fuese unido de alguna manera a la concesión de una subvención, si no, el sector ya lo conocemos”. Esta ayuda podría referirse a incentivos fiscales o “de algún otro tipo”.

Tras la aprobación por el Consell, la ley deberá debatirse en el pleno de Les Corts, en comisión y nuevamente en el pleno, por lo que la previsión es de que pueda estar aprobada tras el verano.