Turquía envía variedades como la Clavel, unos limones con menos zumo y más corteza que los limones españoles, con precios que oscilan los 80/90 céntimos en destino y se venden sobre 1,10/1,20 euros el kilo, unos 30 céntimos más baratos que los españoles. "La calidad no es tan buena como la de los cítricos españoles, pero son más baratos".
Otra particularidad para los limones de este año son los calibres, especialmente los de Turquía, que son más pequeños de lo normal. "Las últimas lluvias nos han venido bien aquí, estamos esperando a ver si la fruta gana algo de tamaño, pero por lo general, la fruta será más pequeña."