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Jerónimo Lozano, director de la Unión Regional de Cooperativas Agrarias (Urcacyl), en la que estas integradas más de 200 entidades, explica que este comportamiento "en buena parte ha sido así porque es un sector que ha estado en permanente crisis por los precios y le ha llevado a ser más ahorrador y previsor. También es más cumplidor, con menos morosidad y de hecho se ve cómo los bancos ahora se interesan por las cooperativas cuando tradicionalmente no era un mercado suyo. Llevamos unos años con unas cosechas aceptables, buenos precios y se ha mejorados los sectores que peor lo estaban pasando. Tanto el de leche de vacuno como de ovino se han ido recuperando porque estaban en una situación muy críticas, con inversiones muy fuertes que habían hecho y con precios por debajo de coste. Era una situación insostenible".

No obstante, Lozano reconoce que "tampoco hemos sido totalmente ajenos a la crisis y tenemos algunas cooperativas con problemas, incluso a algún concurso, pero ha sido debido a inversiones que eran desorbitadas o que no tenían un proyecto claro de viabilidad empresarial, pero son las mínimas".

Aunque estamos asistiendo a la desaparición de algunas cooperativas, que por su tamaño no tienen capacidad a nivel técnico, gerencial o de inversiones para ser competitivos, el sector está ganando músculo con un mayor número de acuerdos entre cooperativas, tanto de comercialización, de suministro de producto o de uso de instalaciones.

No obstante, queda mucho camino para que se produzcan las tan ansiadas fusiones ya que Castilla y León quedará fuera del proceso que fomenta la nueva Ley de Integración Cooperativa aprobado por el Ministerio de Agricultura porque se exigen facturaciones mucho mayores de las que arrojan las de Castilla y León. "Nosotros estamos en esa línea y apoyamos la creación de una figura a nivel regional en la Ley Agraria. Sería un tema intermedio, por lo que podría haber cooperativas dimensionadas para ganar tamaño a nivel interno y luego en un futuro ser prioritarias a nivel nacional".

La internacionalización es otra de las asignaturas pendientes del sector, aunque Lozano afirma que muchas cooperativas todavía tiene mucho recorrido en el mercado interior. "La salida al exterior está muy bien pero lleva unos costes añadidos muy altos y es importante consolidarse en los mercados que tienes y en la medida que se vayan saturando ir saliendo. Quizás es verdad que deberíamos vender mejor los productos que trabajamos, de muchísima calidad, pero no lo mostramos suficientemente y tienen muchas posibilidades".

Exceso de regulación

El sector regional está pendiente además de una nueva legislación autonómica que está negociando con la Consejería de Economía. "Por una parte es bienvenida pero por otra parte en España tenemos 17 leyes cooperativas y eso no nos permite crecer. Es una auténtica torre de Babel, porque cada comunidad legisla de una manera distinta. Hay que que poner cierto orden", dice Lozano, que añade que "cada autonomía tiene sus políticas de apyo y hay unas diferencias sustanciales".