23/03/14
Las cooperativas son el motor económico de Extremadura
No en vano, las aproximadamente 230 cooperativas que se integran en Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura, la federación que las aglutina para representarlas y defender sus intereses, facturaron más de 887,5 millones de euros en el año 2013, lo que representa el 5,4% del PIB regional.
Estas 230 cooperativas que componen Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura cuentan con alrededor de 40.000 socios agricultores y ganaderos y dan empleo fijo a 1.300 personas de la región, a los que hay que sumar más de 600 contrataciones anuales como fijos discontinuos y unos 1.700 eventuales, sumando así el 1% de la población activa de Extremadura. Con ello, representan además el 4,5% del empleo total nacional en las cooperativas agroalimentarias, siendo Extremadura la séptima comunidad autónoma con mayor número de trabajadores en cooperativas.
“Las cooperativas han ayudado a que el sector agroalimentario sea el primer sector económico de nuestra región y ocupan un importante lugar en su crecimiento”, asegura el presidente de Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura, Florentino Tienza, quien destaca que el movimiento agroalimentario cooperativo ha conseguido vertebrar Extremadura, “de hecho, en muchos de nuestros pueblos, la cooperativa es la única empresa o industria que existe”.
Tienza resalta que las cooperativas extremeñas, además de ser las responsables de los alimentos que consumimos cada día, han modernizado el sector, están firmemente comprometidas con las zonas rurales y con el medio ambiente, han contribuido a mantener la renta de los agricultores y ganaderos, reducen los intermediarios en la cadena alimentaria.
Y es que, desde que se inició el movimiento cooperativo en Extremadura, el avance experimentado por las cooperativas ha sido muy importante, influyendo siempre en el desarrollo del territorio, donde generan riqueza y empleo. Así, las cooperativas han hecho que la agricultura y ganadería extremeña sea técnicamente avanzada y comercialmente competitiva; y han creado una fuerte agroindustria que ya ha superado el reto de transformar las materias primas extremeñas en productos de una calidad excepcional, dejando ese valor añadido en la región, mientras afrontan hoy el reto de comercializar dichos productos.
“La visión empresarial es cada vez mayor y se están aprovechando oportunidades de internacionalización para dar salida a nuestros productos en el mercado y de I+D+i con iniciativas importantes”, explica el presidente de Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura, quien agrega que “hoy podemos presumir de cooperativas que exportan sus productos a los cinco continentes, y lo que es más importante, con su propia marca”.
El 56% de las cooperativas de segundo grado de Extremadura tienen productos de marca propia y el 53% exportan sus productos, según los datos del último Observatorio Socioeconómico del Cooperativismo Agro-alimentario (OSCAE). Los principales destinos de las exportaciones que realizan las cooperativas extremeñas de segundo grado son Portugal (69%), Francia e Italia (50%), aunque también son mercados importantes Reino Unido y Alemania. Para las cooperativas de primer grado de la región, Alemania y Portugal (14%) son los principales países a los que exportan, seguido de Reino Unido (10%).
Los datos del OSCAE arrojan otras importantes características de las cooperativas extremeñas, como es la apuesta constante que realizan por los proyectos innovadores, ya que el 62% de las cooperativas participan en alguno, siendo así Extremadura la segunda comunidad autónoma en el impulso de la I+D+i en el sector cooperativo.
También es la segunda comunidad autónoma con mayor número de cooperativas de segundo grado que apuestan por la calidad empresarial, dado que el 50% de las cooperativas extremeñas de segundo grado dispone de algún tipo de certificación en sistemas de calidad.
“Con todo eso, nuestros deberes están hechos. Ahora es necesario que en ese camino que estamos trazando día a día, con nuestro esfuerzo, con nuestro trabajo, con nuestros riesgos, nos acompañen los demás con su apoyo, y no con declaraciones que dañan a un sector que ha trabajado y trabaja por Extremadura. Necesitamos el apoyo social y económico para los productos de las cooperativas, cuyas principales características son la calidad y la seguridad alimentaria”, explica Florentino Tienza.
En este sentido, la comercialización es el principal reto al que se enfrentan hoy las cooperativas extremeñas, junto al desafío de ganar tamaño, al estar la dimensión empresarial directamente relacionada con la productividad, la competitividad y la capacidad de negociación. “Todo ello depende de nosotros los primeros, pero también son necesarias medidas concretas de apoyo a las fusiones, como existen en otros países europeos, donde ha habido un importantísimo proceso integrador”, señala el presidente de Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura, quien alaba las iniciativas legislativas para el fomento de la integración de las cooperativas.
Esto es precisamente en lo que está centrando hoy sus esfuerzos Cooperativas Agroalimentarias Extremadura, en potenciar la creación de estructuras productivas agroalimentarias fuertes que puedan influir en la cadena de valor de los productos con los que opere, concentrando así la oferta frente a una distribución tremendamente concentrada ya para ganar competitividad.
Actualmente, Extremadura se sitúa entre los primeros puestos en el ranking cooperativo en cuanto a número de cooperativas asociadas en su federación, Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura, y en cuanto a cifra de negocio, siendo la quinta y sexta respectivamente a nivel nacional.
Extremadura representa así el 7,2% de las cooperativas de España, que suponen el 6,7% de la cifra de negocio de las cooperativas españolas. Además, cuenta con una cooperativa entre las diez primeras de España, Acorex, ocupando el sexto puesto a nivel nacional.
El “top 10” de las cooperativas extremeñas lo componen Acorex, Acopaex, Viñaoliva, Casat, Oviso, Agrupación Valle del Jerte, San Isidro de Miajadas, Cooprado, Tomates del Guadiana y Pronat. Diez cooperativas que abarcan todos los sectores agrarios y ganaderos y que facturaron en torno a 600 millones de euros, un 18% más que dos años antes.
Todo ello viene a reflejar la importancia de las cooperativas extremeñas como empresas y su papel en el sector agroindustrial de la región, con el valor añadido de generar riqueza y empleo en el territorio donde se asientan, comprometidas con las zonas rurales y con el medio ambiente.