23/09/13
Los agricultores españoles alcanzan récord histórico de siembra de cultivos biotecnológicos con más de 136.000 hectáreas en 2013
Coincidiendo con el cumplimiento de los 16 años de siembra continuada de maíz modificado genéticamente (MG) en España, la apuesta de los agricultores españoles por estas semillas en 2013 ha alcanzado récord histórico de adopción con 136.962,45 hectáreas. Así se desprende de los datos finales ofrecidos por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (MAGRAMA) sobre superficies de maíz sembradas en España durante 2013.
Un total de 136.962,45 hectáreas fueron cultivadas en España con maíz MG en 2013, lo que supone un incremento de 20.655,85 hectáreas y casi un 18% respecto al año anterior. Respecto a la producción total de maíz grano, las variedades modificadas genéticamente han representado el 32% del total sembrado en el país, un 2% más que en 2012.
Aragón es la comunidad autónoma con mayor superficie sembrada de maíz Bt con 54.451,15 hectáreas, 12.781,76 más que en 2012. Le siguen Cataluña y Extremadura con 33.995,95 y 16.979,12 hectáreas, respectivamente, con un aumento de 465,09 y 1.027,59 hectáreas cada una. Destaca el importante aumento en Andalucía donde se han alcanzado las 14.078,53 hectáreas, con un crecimiento del 35% respecto al año 2012. Las provincias con mayor siembra de maíz biotecnológico han sido Huesca (33.228,82), Lérida (27.654,19), Zaragoza (21.055,86), Badajoz (10.459,71) y Sevilla (7.953,53).
El aumento sostenido del cultivo de maíz MG confirma un año más la confianza de los agricultores españoles en estas variedades. Unas semillas que permiten incrementar la producción del cultivo de forma sostenible reduciendo el consumo de recursos por unidad de producción (menos suelo, menos agua, y menos energía). Estas ventajas se traducen en beneficios directos para el agricultor que hacen la actividad agrícola más rentable y competitiva.
Los agricultores europeos siguen demandando el acceso a más variedades MG para competir en condiciones de igualdad. Se estima que si los agricultores europeos pudieran cultivar las variedades MG aprobadas en los países competidores podrían tener un ingreso adicional de entre 443 y 929 millones de euros al año.