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Eugenio DOP

23/09/14

MAGRAMA controlará las grandes denominaciones

Se avecinan cambios en las Denominaciones de Origen Protegidas (DOP) y en las Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP) que abarcan varias comunidades autónomas. El Gobierno ha aprobado este viernes el anteproyecto de ley que regulará denominaciones de origen para adaptarlas a la regulación europea.

La principal novedad es que pone fin a que los propios consejos reguladores de las denominaciones de origen controlen si lo que producen reúne o no las condiciones para estar bajo el paraguas de la denominación. Este método, de dudosa imparcialidad y escasa independencia, ha sido cuestionado en varias ocasiones por la Comisión Europea, lo que ha llevado al Gobierno a ponerle fin. A partir de ahora será el Ministerio de Agricultura, a través de sus propios organismos competentes, el que controlará la calidad de los productos en aquellas denominaciones de origen que abarcan más de una comunidad autónoma, y establecerá las sanciones correspondientes cuando se incumpla la normativa.

Este cambio no es baladí porque protegerá más a los consumidores, ya que tendrán más garantías de que los productos que compran tienen las características acordes con su denominación y, además, beneficiará a la exportación, argumenta el Gobierno.

Favorecerá la exportación

El hecho de que en doce Denominaciones de Origen españolas, que abarcan las más grandes en cuanto a valor en el caso del vino -al incluirse Rioja y Cava-, y en el del jamón -con Guijuelo y Huelva-, pasen a estar controladas ahora por un organismo independiente de los propios productores, como va a ser el Ministerio de Agricultura, le da muchas más garantías a los compradores internacionales, muy importantes en todos estos sectores.

Fernando Burgaz, director general de Alimentación del Ministerio de Agricultura, aseguró ayer a ABC que «la nueva norma pretende clarificar y unificar criterios en una materia que en algunos aspectos estaba regulada por normas de 1970, incluso antes de la creación de las comunidades autónomas. Será el Ministerio de Agricultura el que controle a partir de ahora las grandes denominaciones de origen aunque se podrá delegar en los consejos reguladores bajo determinadas circunstancias de independencia, imparcialidad, etc. Al final lo que estamos haciendo es seguir la normativa europea ya que la propia Comisión Europea nos había advertido en varias ocasiones de que teníamos que cambiar la regulación para aumentar las garantías, y eso es lo que pretendemos con la nueva ley».

La norma adapta el marco jurídico de las estructuras de gestión de modo que los consejos reguladores de las indicaciones geográficas «supraautonómicas» tendrán personalidad jurídica propia y un sistema de funcionamiento basado, fundamentalmente, en el derecho privado que delimita su naturaleza jurídica, estructura y funciones. Además se reconoce y refuerza el papel de los consejos reguladores como órganos de gestión de las DOP e IGP y de colaboración con la administración.

Hasta el momento hay nueve DOP o IGP que han pedido convertirse en corporaciones de derecho público: Cava, Rioja, Jumilla, Idiazábal, Jamón de Huelva, Carne de Ávila, Guijuelo, Espárrago de Navarra y Arroz de Calasparra y hay otras tres que aún no lo han decidido: vino de Ribera de Qeiles, cordero segureño y queso los Beyos.

El valor económico de los productos de las DOP e IGP de vino y de productos alimentarios fue de 3.972 millones de euros en el año 2012.

Los productos afectados

Los productos con Denominación de Origen Protegida (DOP) o Indicación Geográfica Protegida (IGP) poseen cualidades excepcionales de sabor, composición y aroma, entre otros, y los métodos locales utilizados para producirlos crean un vínculo de confianza entre el consumidor, el producto, el lugar de donde es originario y las personas que allí viven y que los producen.

Las etiquetas DOP e IGP indican los diferentes niveles de relación con un área geográfica siendo el vínculo territorial más fuerte en el caso de las denominaciones de origen. Luego, a distancia está la etiqueta de Especialidad Tradicional Garantizada (ETG), que significa que posee alguna cualidad, reputación u otra característica que los diferencia de otros productos de su misma categoría y pueden ser producidos en cualquier zona geográfica.

Con la nueva ley, Agricultura pasará a controlar las siguientes denominaciones de origen: vino de Rioja, cava, jamón de Guijuelo y jamón de Huelva, vino Ribera el Queiles, vino de Jumilla, queso Idiazábal, carne de Ávila, espárrago de Navarra, arroz de Calasparra, cordero segureño y queso Los Beyos.