12/11/13
Se logra una leche más saludable con tomillo y clavo en la dieta de las ovejas
Plantas como el tomillo o el clavo en la dieta del ganado ovino contribuyen a mejorar el contenido en grasas de la leche sin variar el aroma final del producto. Esta es la principal conclusión del proyecto que la profesora de la Universidad de Salamanca Isabel Revilla dio a conocer en el estreno de las Jornadas de Otoño de la Fundación Científica Caja Rural. Se trata de las observaciones preliminares del proyecto de la Escuela Politécnica de Zamora financiado por la entidad, cuyos datos pudieron conocer los zamoranos que se congregaron en el paraninfo del Colegio Universitario. Para estudiar la «adicción» de aceites esenciales de estas plantas, la doctora Revilla contó con la colaboración del ganadero de Fariza Alonso Santos. En su granja, se disgregaron en dos grupos ejemplares ovinos que tomaron durante veinte días los productos naturales seleccionados.
El análisis, como señala en su información la www.laopiniondezamora.es, ha permitido saber que «el tomillo mejora la grasa y el contenido de proteínas, disminuye las grasas saturadas y mejora el perfil lipídico». Interesaba saber también si el tomillo producía algún tipo de efecto en el aroma final de la leche. A expensas de someter los resultados a catas de expertos, Isabel Revilla avanzó que no existe una modificación sustancial del olor de la leche.
El análisis de los efectos del clavo en el producto lácteo arroja resultados similares, aunque de una manera más contenida. Según la autora del proyecto premiado por la Fundación, el aporte del principio activo del clavo también mejora el perfil de las grasas y «crecen los aromas frescos y de cítricos».
Por otro lado, la doctora Isabel Revilla aclaró que los efectos de las plantas seleccionadas en las ovejas «solo se produce de una manera más intensa al principio». Es decir, que los análisis demuestran un efecto más pronunciado en los primeros días de consumo y una caída a partir de un determinado momento.
Lo ideal es utilizar en la dieta directamente las plantas
La investigadora seleccionó estas plantas por sus principios activos, aunque valoró también poder incluir otras especies como el orégano. En todo caso, «lo ideal es poder utilizar en la dieta directamente las plantas, no solo los aceites esenciales», explica. El tomillo es una planta particularmente abundante en el campo zamorano, mientras que los aceites «encarecen el coste» para los ganaderos.
A falta de análisis más completos y de que progrese la investigación, Isabel Revilla avanza que la utilización de este tipo de vegetales en la alimentación del ganado ovino «puede mejorar la calidad de la leche», una posibilidad interesante para los ganaderos zamoranos. De cualquier modo, solo se trata de un proyecto experimental y, tal y como avanzó la profesora, hasta la fecha no hay perspectivas reales de poner este sistema en práctica. La investigación se llevó a cabo en un rebaño pequeño -dos grupos de 24 ovejas- para facilitar el trabajo del ganadero, pero puede aplicarse a otros de mayor tamaño.
Las Jornadas de Otoño que organiza la Fundación Científica de Caja Rural vive hoy su segunda jornada con la conferencia del doctor José Luis Santos Iglesias, jefe de la sección de Cardiología en el complejo hospitalario Virgen de la Concha, para hablar del «Panorama de la anticoagulación en la actualidad».