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Agrasys, propietaria de su exclusividad comercial desde el año 2006, describe así el Tritordeum: «Es un nuevo cereal natural 100% que combina lo mejor del trigo duro y de la cebada silvestre sudamericana. Ofrece una serie de propiedades que aportan grandes beneficios para la salud, para la nutrición, y organolépticas». Como principales ventajas nutricionales destacan que es rico en fibra y antioxidantes. Contiene menos gluten reactivo que trigo y espelta, es más proteico y contiene minerales esenciales, luteína y fructanos.

En cuanto a cuestiones organolépticas, destacan «su excelente sabor y un atractivo color amarillo oro inconfundible». También apuntan que es «adecuado para la elaboración muy natural de una amplia gama de productos para la panadería y la pastelería».

Respecto a sus cualidades agronómicas, destacan una baja demanda de insumos y su resistencia a la sequía, el calor y las enfermedades. En cuanto a su adaptación, tritordeum obtiene rendimientos similares a los de los trigos en las zonas típicas de trigo duro, alcanzando sus mejores resultados en las localizaciones más meridionales. En cuanto al tamaño de las espigas, el propio profesor Martín Muñoz nos ofrece una gráfica comparativa en el reportaje de HdL. Nuevos objetivos de mejora buscan mayor resistencia al frío (pensando en los mercados del norte de Europa), así como plantas con ciclos de crecimiento más cortos.

Más de 30 años de trabajo

Los orígenes de este nuevo cereal se remontan a la década de 1970, con las primeras investigaciones que buscaban mejoras en el cruce entre trigo duro y una cebada silvestre de origen sudamericano, la Hordeum chilense.

Aprovechando la variabilidad natural existente entre estas dos especies, Martín Muñoz y su equipo combinaron unas 80 líneas de trigo duro con más de un centenar de Hordeum chilense, recolectadas en diversas expediciones a Chile y Argentina. El resultado fue la obtención de 250 líneas primarias de tritordeum, que desde 1977 se han ido combinando y mejorando hasta obtener las variantes actualmente en fase experimental (existen 13 líneas avanzadas que se prueban en campos de España, Portugal e Italia). En el año 2006 la empresa Agrasys, Spin off del CISC con sede en el Parc Científic de Barcelona, se hizo con los derechos exclusivos de comercialización del tritordeum, aunque el IAS-CSIC ha seguido trabajando en su programa de mejora.

¿Por qué el Tritordeum es especial?

Por su enorme diversidad genética, frente a la homogeneización resultado de miles de años de mejora y selección de los cereales convencionales. Agrasys, la empresa surgida del seno del CSIC, lo explica así:

«La base de germoplasma de la que se seleccionan las líneas avanzadas de tritordeum contiene más de 250 líneas primarias de tritordeum, derivadas de cruzamientos entre distintos parentales de trigo duro y Hordeum chilense. Esta colección de germoplasma contiene gran diversidad para muchos caracteres de interés como componentes nutricionales y funcionales. Tamaña diversidad se ha perdido en gran medida en los cereales convencionales, los cuales, después de siglos de mejora y selección, son mucho más homogéneos».

Actualmente ya existen dos variedades comerciales, bajo los nombres Aucan y Bulel: Aucan, registrada en el año 2008, fue la primera variedad protegida en Europa en la CPVO (Community Plant Variety Office), a la que se sumó Bulel en enero de 2013. El 25 de abril se presentó oficialmente en Barcelona el nuevo pan hecho a base de harina de tritordeum al que hace referencia el reportaje de Historias de Luz. Casi 40 años después de las primeras investigaciones de Antonio Martín Muñoz, el padre de este nuevo y prometedor cereal que, parece, ha llegado para quedarse.