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Los datos divulgados una semana atrás superaron la suba que el mercado esperaba y en consecuencia este se movió a la baja, confirmando un escenario muy desafiante para la agricultura del Mercosur y en particular para Uruguay, que cuenta con costos de energía y transporte superior al de los vecinos.

El Departamento de Agricultura de EEUU (USDA, por su sigla en inglés) divulgó varios reportes –de área, stock, proyecciones globales y desarrollo de los cultivos en EEUU– que coincidieron en apuntar a dos gigantescas cosechas en soja y maíz y a una aceptable en trigo. En particular, el USDA divulgó el viernes 11 su informe mensual de oferta y demanda, que confirmó la presión a la baja sobre los precios de los granos.

La soja debilitada

En soja todo es récord. El área estadounidense, la producción global, el stock mundial. El USDA reportó un nivel de existencias claramente superior al esperado por el promedio del mercado, mientras que previó un área récord sembrada que también fue mayor a la prevista.

Los demás granos también cayeron aunque los reportes no fueron tan contundentemente bajistas. Para el maíz, el dato de stocks al 1° de junio estuvo ligeramente por encima de lo esperado, con una estimación de área que no sufrió casi cambios respecto a lo esperado y que confirma las proyecciones de otra cosecha de alto volumen. El trigo también se movió a la baja. La estimación de área fue superior a la prevista por una expansión más marcada en la superficie dedicada en primavera.

En la primera quincena de julio la soja acumuló 10 jornadas a la baja. Fue la racha más larga –en días consecutivos– para la soja desde julio de 1973. Y aunque fue interrumpida el lunes pasado con un rebote, los precios retomaron luego el descenso. Es que se espera un salto en las reservas de EEUU que casi se triplicarán respecto al año pasado. Serán las reservas más abundantes desde 2006/2007. Pasan de menos de 4 millones de toneladas en el presente a una proyección de más de 11 millones a mediados del año próximo. Esta cifra sumada a la acumulación de soja que tienen argentinos y brasileños llevan a un stock récord mundial de más de 85 millones de toneladas, 3 millones más de las que se esperaban un año atrás y 18 millones de toneladas más que el año pasado.

En su proyección de precios, el USDA ajustó el precio promedio que recibirían los productores estadounidenses por soja de US$ 395/t a US$ 385/t frente a los US$ 477,7/t previstos para el actual año comercial que termina el 31 de agosto.

Justamente, US$ 385 por tonelada es lo que se ofrece actualmente como precio para el grano puesto en Nueva Palmira en estos momentos. Para quienes están lejos de puertos en Uruguay, esa cotización significa un riesgo muy grande porque el precio neto que queda es bastante menor que eso, y el precio de la tierra y los insumos no ha bajado.

Para Brasil se ajustó levemente al alza la estimación de exportaciones para el actual año comercial. En tanto, se mantuvieron las previsiones para 2014/2015 con una cosecha de 91 millones de toneladas y un total de exportaciones en 45 millones, apenas por debajo del ciclo actual.

Para Argentina se mantuvo el pronóstico de cosecha en 54 millones de toneladas –sin cambios respecto a 2013/2014–, pero corrigiendo la previsión de exportaciones de 9 millones a 8,5 millones de toneladas. Pero ya hay empresas que han anunciado su disposición a reducir área en ambos países si los actuales precios no cambian.

Dentro de las pocas buenas noticias del informe del USDA está el incremento esperado para las importaciones chinas en la próxima campaña.

Se mantuvo la estimación de producción en 12 millones de toneladas y se aumentó la de importaciones de 72 millones a 73 millones de toneladas. China mantiene un ritmo de crecimiento de sus importaciones de 4 millones de toneladas al año –importó 69 millones de toneladas en 2013/14–. Pero ese aumento de las compras absorbe menos de un tercio del aumento en la producción estadounidense.

Aurelio Pavinato, director de la empresa brasileña SLC, que maneja unas 400 mil hectáreas agrícolas en Brasil, anunció a la agencia Bloomberg que su empresa será muy cuidadosa al determinar áreas. El cinturón sojero brasileño está a más de 2.000 kilómetros de puertos y el gasto de transporte puede superar al potencial margen del cultivo.

Sin embargo, el director de El Tejar en Brasil, Ismael Turbán, instalado en Mato Grosso, dijo que no espera reducciones importantes en el área. Es que muchos agricultores traen una inercia de producción y créditos que no pueden detener y aun en el nuevo escenario, la soja es el cultivo que mejor margen promete.

Rendimiento récord en maíz

EEUU combina una elevada superficie sembrada con la proyección de muy altos rendimientos. Por lo tanto, aunque la soja le ha quitado algo de área al maíz, también en este cereal la proyección es de una enorme cosecha. Incluso algo mayor a la del año pasado, si se confirman las 354 millones de toneladas.

Por lo tanto también en este caso ajustó por encima de lo esperado su estimación de stocks finales para 2014/2015, que llegaría a máximos en más de una década. En cuanto a precios, el USDA redujo su estimación sobre el valor promedio que recibirían los productores estadounidenses en 2014/2015 de US$ 165,3/t a US$ 157,5/t frente a los US$ 175,2/t estimados para el año comercial en curso. La producción mundial se mantiene en el mayor nivel de la historia: 982 millones de toneladas. Como para que el mundo respire aliviado y los precios aflojen.

Mercado abastecido en trigo

Desde que empezó la siembra de trigo y cebada, el precio del grano no para de bajar. Y este informe desde la semana pasada prolonga la tendencia. En el caso del trigo, el reporte de oferta y demanda del USDA elevó el pronóstico de cosecha pero la redujo para el trigo duro de invierno (Kansas). Además de eso, se ve un mercado con menos demanda para ración y alta competencia internacional con alzas en las proyecciones de stocks, tanto para EEUU como para el mundo, con un segundo año consecutivo de producción superior a 700 millones de toneladas, que, aunque menor a la del pasado, es suficiente para sostener el aumento en las reservas.

Aumenta la producción de Argentina y Brasil respecto al año pasado, por lo menos en esa proyección previa a la nueva tanda de lluvias que ha golpeado a la región.

Tras una década de penurias, el mundo vuelve a lograr un abastecimiento suficiente de granos y con eso seguramente persistirá en baja el precio de la mayoría de los alimentos, entre ellos los lácteos, que esta semana tuvieron otro fuerte escalón a la baja en los remates de la neozelandesa Fonterra.

Un desafío para toda la agricultura uruguaya

El crecimiento de las exportaciones uruguayas se mantiene basado en el impulso de la agricultura y los lácteos. Ese crecimiento se estancará en volumen y retrocederá en facturación por un menor precio por tonelada exportada. Con este nuevo escenario de precios internacionales, la situación en Uruguay tiene fuertes desafíos por delante, sobre todo para la zafra 2014/2015.

La producción de soja de este año se sitúa sobre 3,2 a 3,3 millones de toneladas frente a los algo más de 3,5 millones del ciclo anterior. Al 10 de julio se llevaban exportadas 2,4 millones de toneladas por US$ 1,23 millones. Esto arroja un precio promedio de US$ 511 la tonelada, 3,5% menor que el promedio de igual período de 2013, de US$ 530. Finalmente, las exportaciones terminaron 2013 con 3,5 millones de toneladas. En comparación con el año pasado, el volumen será inferior y el precio promedio de lo que queda por colocarse estará significativamente por debajo de lo que se ha vendido hasta ahora. De modo que ingresarán menos dólares a la economía por el principal producto agrícola en lo que queda de 2014 y seguramente en 2015. Y es muy probable que el área de maíz se reduzca.

En los cultivos de invierno, el área será menor a la del año pasado. El clima ha distado de ser benigno al inicio de la campaña: tanto en Uruguay como en algunas zonas de Argentina y del sur de Brasil las lluvias han sido excesivas. Y lo preocupante es que la alta probabilidad de un episodio de El Niño hace prever una primavera y comienzos de verano complicados con lluvias por encima del promedio. Los agricultores lo saben y no hubo entusiasmo para plantar. Eso complica porque el doble cultivo tiene mejores números que la opción cobertura y cultivo de verano de primera.

Los precios locales ya reflejan la nueva realidad. En julio del año pasado, la soja 2014 cotizaba a US$ 440 por tonelada, actualmente en el mercado local la soja 2015 cotiza entre US$ 380 y US$ 385 la tonelada. Con stocks menores, no solo el precio era más alto sino que la volatilidad fue mayor de la que puede esperarse para esta campaña. El impacto en márgenes será importante y pondrá a prueba la expansión que la agricultura uruguaya ha tenido hasta ahora.

Este nuevo escenario reduciría los márgenes de los productores y en muchos casos podrían ser negativos. “Es el más complicado de los últimos años. No solo bajan los precios, sino que además algunos costos como los de fertilizantes han subido. Es muy difícil lograr promedios de más de 2.500 kilos de soja por hectárea, el rendimiento de equilibrio está 200 kilos por encima de eso”, explicó el agricultor Gabriel Carballal. De todos modos, falta mucho y los precios pueden levantar. “Hay exceso de agua en EEUU, si sigue lloviendo la producción puede ser menor a la que se está pronosticando”, apuntó.