13/10/15
Aceite de oliva de alta gama a partir de cosechas tempranas
La cosecha temprana de recolección de la aceituna es equivalente a la obtención de un aceite de oliva de alta gama, un producto gourmet exquisito que cada día tiene más adeptos y consumidores. Y ello es debido a la sobresaliente calidad que atesoran estos zumos de aceituna que destacan por su perfil organoléptico de gran intensidad, así como por un sabor y un aroma que son un placer para los sentidos. Ya ha comenzado en algunos puntos de la provincia de Jaén la recolección de la cosecha temprana para obtener los primeros aceites de oliva virgen extra (AOVE), los considerados "aceites premium", que destacan por una calidad singular y exclusiva que los harán en los próximos meses merecedores de reconocimientos nacionales e internacionales.
No será hasta la segunda quincena de este mes cuando se generalice la recolección de la cosecha temprana, que cada vez goza de más predicamento y seguidores entre gran parte del sector oleícola, cuyas cooperativas y almazaras se han lanzado ya al reto de producir aceite de oliva de excelente calidad en octubre y en los primeros días de noviembre.
La Fiesta de la Aceituna, que marca el inico de la campaña, se adelanta ya un mes
Hasta no hace mucho tiempo la recolección en la provincia de Jaén, que moviliza a decenas de miles de personas, daba su pistoletazo de salida con la Fiesta de la Aceituna que se celebra en Martos, la cuna del olivar, el 8 de diciembre, aunque ya desde el pasado año la Diputación de Jaén instauró la Fiesta del Primer Aceite a primeros de noviembre y en esta edición se podría celebrar en la capital jiennense.
El aceite de oliva virgen extra de la cosecha temprana está elaborado a partir de un cuidado proceso de selección de las mejores aceitunas verdes o en envero (color morado cuando pasa del verde al negro), que son recolectadas en el punto óptimo de maduración y transportadas a la almazara en un periodo de tiempo mínimo, como hace por ejemplo Aceite Castillo de Canena desde hace una década.
A Castillo de Canena le han seguido otras muchas empresas del sector oleícola que se afanan por obtener, con mucho esmero y con no poco mimo, un alimento "delicatesen" y de calidad selecta que el consumidor sabe premiar y disfrutar, pese al mayor coste económico que tienen estos aceites "premium" que generan un importante valor añadido.
Gran parte del sector tiene claro que la cosecha temprana es "un camino sin retorno", por lo que entienden que es "un carro al que hay que subirse", según subraya el creador de la marca de aceite Supremo, Andrés García Gallego, quien no tiene "ninguna duda de que estos aceites dan prestigio y el consumidor lo sabe agradecer por la riqueza de matices que tienen".
"Es como la pata negra del jamón y no podemos renunciar a este producto"
García Gallego aventura una cosecha temprana de "grandes y buenos picuales", en una campaña que define como "heterogénea, con distintos calibres, con diferente maduración y con gran variabilidad de aceites en su tipología y en sus características".
Por eso, es un firme defensor de la cosecha temprana porque, en su opinión, "es una gran opción que tenemos y hay que aprovecharla, es como la pata negra del cerdo, del jamón, y no podemos renunciar a una parte tan importante de nuestro producto, porque en el aceite de oliva, como en el caso del cerdo, todo es bueno".
Aunque ya han salido al mercado los primeros aceites envasados, no será hasta dentro de unos días cuando se generalice la cosecha temprana, porque, como reconoce el secretario del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida Sierra de Cazorla, Emilio Tíscar, las zonas de sierra van con "un poco de retraso en cuanto a maduración" respecto a las zonas de campiñas y de lomas de olivar.