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Cuando al ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias cañete, se le menciona la palabra cooperativa se descompone porque es muy consciente de que este movimiento está muy instalado a nivel nacional, pero sin peso a nivel europeo y mucho menos internacional. Y los últimos datos así lo revelan, porque sólo cinco empresar agroalimentarias españolas están entre las cien primeras de Europa y la más importante, Coren, ocupa un discreto puesto 54. Su debilidad es tanta que entre las cinco (Coren, Central Lechera Asturiana, Grupo AN, Anecoop y Hijiblanca) sólo facturan un tercio de la primera, la holandesa Frieslandcampina.

Y aunque en los últimos tiempos se está dando un proceso de fusión y de impulso, impulsado por el Gobierno pero también por los propios sectores, concientes de que la unión hace la fuerza, y se esperan algunos más sobre todo en el sector del vacuno y del ovino, lo cierto es que el cooperativismo nacional sigue muy lejano de los objetivos marcados, o deseados, por el ministro.

Y se debe reconocer que se están dando pasos, como es el caso de Hojiblanca o Anecoop, o el más reciente del Grupo AN, el primer grupo cerealista español y una de las más grandes del ámbito multiproducto, que ha llegado a subir 14 puestos en la última lista europea, pero aún queda mucho camino por recorrer.

Así, las cooperativas españolas incluidas en el Top 100 Coop.Champion, ni siquiera se acerca a la de las cooperativas que ocupan los primeros puestos de la lista, como la holandesa FrieslandCampina, fruto de una fusión entre dos grandes cooperativas del sector lácteo, cuya cifra de negocio supera los 9.600 millones de euros en el ejercicio 2010/2011, o la también holandesa del sector cárnico, Vion Food, que aparece la segunda en el ránking con una facturación de 8.870 millones de euros.

De hecho, ninguna de las diez primeras cooperativas incluidas en el Top 100 bajan de los 5.300 millones de euros de cifra de negocio, y las treinta primeras se sitúan todas por encima de los 2.000 millones de euros, mientras que Coren, la primera española apena supera los mil millones.

La dimensión de estas cooperativas europeas evidencia la situación actual, con un mercado globalizado, contexto en el que compiten las españolas. De ahí la importancia de concentrar la oferta, para competir en un escenario internacional

donde los competidores tienen unas dimensiones muy superiores a las cooperativas españolas.

Por países dominan los nórdicos

Los primeros puestos del Top 100 lo ocupan cooperativas holandesas, alemanas y danesas, países donde el sector cooperativo agrario es muy fuerte y concentrado. Francia también es un país con una estructura fuerte, representada en las 29 cooperativas en el ránking, que suponen el 25% de la facturación total del Top 100, que asciende a 195 billones de euros.

A Francia le sigue Alemania, con 15 cooperativas en la lista que suponen un 19% de la facturación total. Tras las danesas, las cooperativas holandesas son las más grandes, de ahí que ocupen los primeros puestos del ránking, aunque las francesas y las danesas crecen más rápido que éstas.

No obstante, Holanda es el tercer país en el ránking, con 11 cooperativas que suponen un significativo 18% de la facturación total de las 100 cooperativas incluidas en el Top 100. Dinamarca ocupa el cuarto puesto por países, con un 12% de la facturación total. Éstas son bastantes similares en estructura a las holandesas, muchas de las cuales se han fusionado a nivel nacional e incluso internacional.

Por sectores mandan el lácteo y el de sumunistros

Las cooperativas lácteas son el sector más amplio, tanto en términos numéricos, con 33 cooperativas incluidas en el ránking, como económicos, con una facturación que supone el 28% del volumen total del Top 100.

En el ámbito de suministro y marketing, aparecen 15 casos que facturan el 23% de la cifra total. Éstas, con más de 3 billones de euros de facturación de media, son las cooperativas más grandes en términos relativos. Las agrarias también son fuertes, especialmente cuando se incluyen las multiproducto, que desarrollan más de una actividad y, por lo tanto, pertenecen a varios subsectores del ámbito agroalimentario.

Destaca el reducido tamaño de las cooperativas hortícolas, que a pesar de que existir un alto número de las mismas, al ser tan pequeñas aparecen pocas en el ránking.