15/07/15
Las perspectivas para las cosechas en 2015 son favorables a nivel mundial
Según la última edición del informe mensual sobre el Índice de precios de los alimentos de la FAO y la nueva edición del informe trimestral Perspectivas de cosechas y situación alimentaria (CPFS), ambos publicados hoy, la producción mundial de cereales de este año alcanzará los 2 527 millones de toneladas.
Este volumen representa una disminución del 1,1 por ciento respecto al nivel récord de 2014, pero supone una mejora respecto a las proyecciones hechas el mes pasado.
Mientras tanto, el Índice de precios de los alimentos de la FAO se redujo un 0,9 por ciento en junio en relación a mayo. Con 165,1 puntos, el índice se ha reducido un 21 por ciento respecto a hace un año y está en su nivel más bajo desde septiembre de 2009.
La disminución del Índice se produce principalmente como resultado de una caída del 6,6 por ciento en el precio del azúcar y del 4,1 por ciento en los precios de los productos lácteos, que compensaron con creces un repunte en los precios del aceite de palma y del trigo. El aumento de la demanda mundial de piensos para el ganado, especialmente en Brasil, China y Estados Unidos, está apoyando los precios de los cereales secundarios, incluido el maíz.
Pero esas tendencias de los precios mundiales y las perspectivas favorables para la producción mundial de cereales ocultan puntos localizados de inseguridad alimentaria, advierte también el informe Perspectivas de cosechas y situación alimentaria.
Hay 34 países de todo el mundo, incluyendo 28 en África -muchos albergan a grandes números de refugiados- que necesitan de ayuda alimentaria externa.
Múltiples motivos de preocupación en África
En África, las perspectivas generales de producción de 2015 apuntan a un descenso respecto al nivel elevado del año pasado, con todas las regiones esperando cosechas reducidas, excepto África central y del Norte.
En África meridional, se prevé que la producción total de cereales disminuya en un 17 por ciento, debido principalmente a las lluvias estacionales irregulares y un período de sequía prolongada. La producción total de maíz -que representa el grueso de la producción de cereales de la subregión- se pronostica en 20,6 millones de toneladas, un 26 por ciento por debajo de la producción récord de 2014.
Cargando con la mayor parte de la disminución, la producción de maíz de Sudáfrica se estima en 10,5 millones de toneladas, con una fuerte reducción del 30 por ciento en comparación con el alto nivel del año pasado.
Las cosechas de maíz de Zambia y Malawi en 2015 se estiman en un 21 y 26 por ciento respectivamente por debajo de las de 2014, y el déficit de precipitaciones ha afectado gravemente la producción de maíz en países dependientes de las importaciones como Lesotho, Namibia, Botswana y Swazilandia, con caídas que van desde el 13 hasta un 43 por ciento.
Se espera que estas tendencias impacten negativamente en la disponibilidad de exportaciones a los países vecinos con déficit de cereales como Zimbabwe, donde se calcula que la producción de maíz caiga a la mitad. En comparación con el bajo nivel del año anterior, el número de personas necesitadas de ayuda alimentaria va a aumentar.
En África occidental, una buena producción general del año pasado en la región del Sahel oculta problemas de seguridad alimentaria a nivel local, añade el informe publicado hoy.
Las últimas estimaciones cifran la producción total de cereales de 2014 en los nueve países del Sahel en 21 millones de toneladas, alrededor de un 7 por ciento más que el promedio de cinco años, gracias a buena producción en Malí y diversos países costeros.
Sin embargo, en amplias zonas del Sahel se ha registrado una fuerte caída en la producción, en particular en los países de la zona occidental de la subregión, debido al mal tiempo. Se estima que la producción de cereales -en comparación con el promedio de cinco años-, ha caído en 2014 en un 83 por ciento en Cabo Verde, el 28 por ciento en Gambia, el 33 por ciento en Guinea-Bissau y el 17 por ciento en Senegal. También se han visto afectadas extensas áreas de Chad, Mauritania y Níger.
En África central, a pesar de las condiciones meteorológicas favorables en la República Centroafricana, se prevé que la continua inseguridad civil afecte de forma negativa a la actual temporada agrícola. El conflicto en la República Democrática del Congo es también motivo de preocupación.
En África oriental, las lluvias tardías e irregulares desde el inicio de la campaña agrícola en marzo han deteriorado las perspectivas de producción.
El informe de hoy destaca, en particular las "alarmantes" condiciones de seguridad alimentaria en las zonas afectadas por los enfrentamientos de Sudán del Sur, donde el número de personas que padecen inseguridad alimentaria grave se calcula se ha duplicado hasta los 4,6 millones de personas desde el comienzo de 2015.
El Cercano Oriente se enfrenta a una creciente crisis humanitaria
Se espera que en 2015 la producción de cereales en el Cercano Oriente se recupere de la sequía del año pasado, impulsada por un aumento previsto del 18 por ciento de la producción en Turquía. Pero los conflictos continúan impactando "gravemente" la agricultura en Irak, Yemen y Siria, que siguen enfrentadas a una "crisis humanitaria creciente", según el informe CPFS.
Destaca en particular la situación en Yemen, donde hay 12,9 millones de personas con inseguridad alimentaria, de ellas 6,1 millones en fase de "emergencia", y los otros 6,8 millones en fase de "crisis", lo que representa un aumento del 21 por ciento respecto al año anterior.
Asia: cosechas récord en China y Pakistán, pero persisten los problemas
En Asia, se espera una cosecha récord en China y Pakistán que compense la disminución en otros lugares, sobre todo en la India como consecuencia de una mala cosecha de trigo.
Nepal ha sufrido caídas en la producción de alimentos debido a los daños del terremoto, y en la República Democrática de Corea, se prevé un período de sequía severa que lleve a la reducción de la producción de cereales en 2015.