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Actualmente el cultivo se encuentra muy avanzado en su fenología, respecto a la pasada campaña, por lo que la incidencia de la polilla del olivo muy asociada con el desarrollo vegetativo del cultivo, se encuentra en la fase de plena actividad de la generación carpófaga.

El  estado fenológico dominante en la comunidad autónoma, este es “G2” (Fruto cuajado) en todas las provincias a excepción de Granada que se encuentra compartido entre los estados “G2” (Fruto cuajado) / “G1” (Caída de pétalos). Se comienza a observar el estado “H” (Endurecimiento de fruto) en aquellas áreas de cultivo más adelantadas de la mayoría de las provincias, a excepción de Granada.

En el periodo que nos encontramos la actividad de la polilla del olivo (Prays oleae) está centrada sobre los frutos, las larvas recién avivadas efectúan una galería hacia el interior del fruto pasando los meses estivales en el interior del hueso. Por los valores registrados destacan Málaga, Sevilla y Córdoba,  con un valor medio provincial del 29, 21 y 18’30% de aceitunas con prays vivo, respectivamente.

En cuanto a la actividad que se viene registrando en cada provincia, destacan algunas Zonas Biológicas como Campiña Alta Oriental II (Córdoba) y Condado (Jaén), en donde se han alcanzado unos valores medios de 56 y 32’14% de aceitunas con prays vivo, respectivamente.

Conviene tener en cuenta ante la actividad de la generación carpófaga, las siguientes recomendaciones:

• En el caso de tomar la decisión de controlar su población mediante tratamiento fitosanitario, hay que tener en cuenta que la Guía de Gestión Integrada de Plagas del olivar contempla como momento de intervención cuando se  alcance / supere un 20% de aceitunas con prays vivo y en torno a un 20% de huevos eclosionados respecto a vivos. Actualmente el porcentaje de huevos eclosionados es del 10% en Sevilla, 4% en Córdoba y 0’80% en Huelva. Siendo inferior en el resto de provincias.
• Es importante resaltar que las condiciones ambientales condicionan claramente la supervivencia y actividad de este agente: altas temperaturas y baja humedad limitan la viabilidad de las puestas y por el contrario si son suaves favorecen su desarrollo, penetrando la larva en el fruto.  Se recomienda tener en cuenta las condiciones meteorológicas como parte de la estrategia de control integrado.

Recordar que la previsión de altas temperaturas para los próximos días, pueden condicionar de manera notable la supervivencia de las puestas y larvas por lo que puede no ser necesario realizar tratamientos, aconsejándose exclusivamente y si los muestreos así lo indican, en aquellas zonas con un microclima más suave.

Por otra parte, la curva de vuelo de adultos toma una tendencia descendente en todas las provincias, por lo que nos situamos en su fase final de vuelo, a excepción de Granada que se encuentra en aumento, en pleno vuelo de estos adultos.